La Migra, La Migra, La Migra, grita Jonás y todos-todostodos corremos a escondernos, nos metemos bajo la cama, atrás de los sillones, tras las puertas y dentro de los clósets. […] ¿Hay alguien más con ustedes?, pregunta La Migra. No, le decimos. ¿Seguros? Sí, señor Migra, seguros. La Migra se va a la cocina y entonces mi hermano sale de su escondite y nos desamarra y todos gritamos. Adiós señor Migra, adiós, adiós. Somos libres y tú perdiste.
Sylvia Aguilar Zéleny. Todo Eso Es Yo
Sanderson, fuera de mapa
-¿Y cómo vas a hacer ahora?
-Ya no puedo trabajar por mi peso. Solo me queda el tráiler. Y si no me llega el cheque de desempleo, no voy a poder vivir. No hay albergues y mi familia no me va a ayudar.
Del Rio, el culto castrense
Marfa: el cementerio, esa frontera
Pecos, alambre de púas
San Antonio, el mazazo
El Paso, esa membrana
Ciudad Juárez, ese fuego frío
Cristina Burneo Salazar y María José Gutiérrez
Sanderson, fuera de mapa
-¿Y cómo vas a hacer ahora?
-Ya no puedo trabajar por mi peso. Solo me queda el tráiler. Y si no me llega el cheque de desempleo, no voy a poder vivir. No hay albergues y mi familia no me va a ayudar.
Del Rio, el culto castrense
Marfa: el cementerio, esa frontera
Pecos, alambre de púas
San Antonio, el mazazo
El Paso, esa membrana
Ciudad Juárez, ese fuego frío
Cristina Burneo Salazar y María José Gutiérrez
Tuvimos varies guías en este recorrido por el borde de Texas y Ciudad Juárez, realizado en marzo de 2023. Gracias a J. D. Pluecker, Sylvia Aguilar Zéleny, Stalina Villarreal, Saúl Hernández Vargas y Jago Molinete, quienes han trabajado en esta región fronteriza desde la escritura, el arte y el periodismo y que compartieron su conocimiento con nosotres.
Ese borde abstracto desde Ecuador, al que llegan tantas personas que dejan nuestro país, se volvió algo más tangible en este recorrido. Esperamos que esa tangibilidad sirva para comprender mejor las rutas que hoy forman parte de la realidad ecuatoriana.
Nuestro objetivo era constatar las condiciones en que cruzan a Estados Unidos a través de Texas miles de personas desde Ecuador en este tiempo. Las caravanas que salen de Ecuador son mixtas, probablemente todas lo sean, pero no todas las migraciones se conocen en sus señas particulares. En cuanto a la migración ecuatoriana, su magnitud aún es invisible en Estados Unidos a pesar de su intensidad. Entre 2020 y junio de 2023, hubo 158.731 encuentros entre individuos y grupos familiares ecuatorianos y la patrulla fronteriza, sólo en los puntos de Big Bend, Del Rio, El Paso, Laredo y Rio Grande Valley, según datos de U.S. Customs and Border Protection. Se trata exclusivamente de encuentros en este estado y la cifra no incluye a quienes cruzan sin interceptación de la policía.
En cada albergue, iglesia y lugar que visitamos y donde entrevistamos, encontramos en Texas una respuesta similar: «no conocemos a nadie de Ecuador», «nadie ha llegado desde su país». Nadie. La gente cambia de identidad en el camino para proteger su vida o sus pocos bienes. Mientras esto puede proteger, a la vez hace invisibles las marcas y los orígenes de esta migración. La respuesta tan frecuente, «Nadie», recuerda a la estrategia de Ulises al llegar a la isla de los cíclopes. Cuando el gigante Polifemo lo quiere devorar porque su expedición entró a su cueva y se comió su comida, Ulises le responde que se llama «Nadie», le brinda vino y lo embriaga. Acto seguido, lo hiere con un madero candente en el centro de su único ojo. Herido, Polifemo sale por ayuda, grita que «Nadie» lo ha atacado. Ser ese «Nadie» para engañar al gigante, allí una estrategia: dar en el centro del gran ojo para cruzar sus dominios a campo traviesa. Los nadies que se despojan de su historia para construir otra tendrán tretas siempre, astucias de negociación con la violencia del poder fronterizo. Porque no son seres durmientes resignades a esperar la muerte. Que sea de los nadies ese paso por el ojo del cíclope. Mientras tanto, seguimos narrando lo que nos permiten narrar.
Gracias a quienes nos mostraron estos caminos a través de su memoria. Gracias a las personas en lucha que nos permitieron pasar tiempo con ellas y que quisieron contarnos sus historias. El tiempo que nos dieron es parte de su protesta: narrar, demandar, nombrarse. Nos transmitieron su visión del mundo, que es mucho más que un testimonio. Consideramos esto un trabajo: político, emocional, narrativo. Los fondos con los que contamos fueron también para retribuir en algo dicho trabajo. Ante la concepción demasiado frecuente de la persona migrante como «voluntaria» o «asistida», no remunerada, en los perímetros institucionales de la movilidad, aún nos debemos la discusión de cómo hablar, intercambiar, escribir, en acuerdo con ese trabajo.
Esperamos que este recorrido permita entender mejor este borde, que por lo menos en su esfera narrativa debe mantenerse abierto, poroso, franqueable. Para quienes guardan en los vientos de la ruta su nombre, su nacionalidad e historia como un tesoro hasta revelarlos y volver a empezar.
San Antonio, el mazazo
Del Rio, el culto castrense
Sanderson, fuera de mapa
-¿Y cómo vas a hacer ahora?
-Ya no puedo trabajar por mi peso. Solo me queda el tráiler. Y si no me llega el cheque de desempleo, no voy a poder vivir. No hay albergues y mi familia no me va a ayudar.
Marfa: el cementerio, esa frontera
El Paso, esa membrana
Ciudad Juárez, ese fuego frío
Pecos, alambre de púas
La deportación: el no regreso al hogar
Houston: linajes de migrantas
San Antonio, el mazazo
Del Rio, el culto castrense
Sanderson, fuera de mapa
-¿Y cómo vas a hacer ahora?
-Ya no puedo trabajar por mi peso. Solo me queda el tráiler. Y si no me llega el cheque de desempleo, no voy a poder vivir. No hay albergues y mi familia no me va a ayudar.
Marfa: el cementerio, esa frontera
El Paso, esa membrana
Ciudad Juárez, ese fuego frío
Pecos, alambre de púas
La deportación: el no regreso al hogar
Houston: linajes de migrantas
Este recorrido y el trabajo de crónica se hicieron durante una estancia concedida a Cristina Burneo Salazar por el Doctorado en Escritura Creativa de la Universidad de Houston y la Fundación María Jiménez, en la forma de la María Jiménez Fellowship.
El material fotográfico producido por Josep Vecino para esta publicación fue realizado con apoyo de FES-Ildis Ecuador.
La entrevista a Ángel, en Gualaceo, fue parte de un viaje de Corredores Migratorios realizado a fines de 2021, también con el apoyo de FES-Ildis Ecuador.